Qué fotografiar en otoño

jose barrena, oct 23, 2018

Metidos de lleno en el otoño, vamos a ver cómo sacar partido de esta estación y de sus colores para obtener unas fotografías con toda la magia que nos encontraremos estas semanas.

No me cansaré de decirlo, cualquier época del año, cualquier hora del día (y de la noche) son perfectamente válidos para hacer fotografías. Es el fotógrafo el que tiene que adaptarse a las condiciones de luz y de ambiente para captar la esencia de lo que está ocurriendo, si no, no seríamos fotógrafos.

Ahora bien, estando metidos ya de lleno en la estación del otoño, vamos a repasar hoy qué es lo más interesante fotográficamente de esta colorida estación, y qué nos ofrece fotográficamente hablando.

La luz

En otoño tenemos menos horas de luz que en el ya desaparecido verano, pero esta luz es mucho más suave y su temperatura de color algo más cálida. Esto es porque los rayos solares nos llegan con más inclinación debido a la posición de la tierra en el equinoccio. Esta inclinación provoca que las partículas de luz atraviesen más zona de atmósfera que en verano, aumentando el efecto de dispersión y por tanto su suavidad, y perdiendo parte de los tonos azules, lo que la hace más cálida.

La vegetación

El otoño tal vez sea uno de los momentos en que más intensos son los colores de la naturaleza, y también más cambiantes, pudiendo pasar los bosques y los parques del verde estival al ocre apagado en tan sólo dos o tres semanas, eso sí, recorriendo en ese transcurso una gran gama de amarillos, naranjas rojos y marrones.

No sólo eso, sino que la caída de la hoja caduca dota a los paisajes de un precioso aspecto melancólico, algo muy frecuente en los bosques de hayas o de chopos. Puedes fotografiar esos bosques alfombrados de rojo, o jugar con tu objetivo macro y los interesantes fondos que te proporcionaran esos colores otoñales.

Y hablando de fotografía macro, no dejes pasar la ocasión de salir a por setas… con tu cámara, claro. Algo que no podrás hacer fácilmente el resto del año.

Y un poco más tarde, una vez que se han caído las hojas, esos árboles y esas ramas desnudas también ofrecen interesantes imágenes con el cielo al fondo, que podremos utilizar para buscar infinitas composiciones. No digamos nada si jugamos con largas exposiciones un día de viento y nubes, o una noche despejada.

La niebla

¿Y qué decir de la niebla? Sobre todo en la primera parte del otoño, la condensación del rocío aparece muchas mañanas en forma de niebla. No tengas miedo a madrugar, y sal con tu cámara por el campo, en cualquier valle o vaguada verás preciosas estampas de niebla que te llevarás a casa. Y si el campo te pilla lejos, en la ciudad también puedes conseguir auténticos tesoros nebulosos, y si ya tienes la suerte de estar en la montaña, no lo dudes, a por ello!

Personas

Se ha ido el verano, y hemos aprovechado para renovar nuestro vestuario con prendas nuevas, o con aquellas repescadas de la temporada pasada. No te dejes invadir por la pereza, y sal al campo otoñal a fotografiar escenas con personas en poses sugerentes, y con ropa otoñal. Las prendas con caída, el pelo largo y marrón, serán una excelente combinación para un paisaje de estas características.

Como todas las estaciones, el otoño tiene sus atractivos fotográficos, y suele ser muy agradecido si sales a por él, pero como siempre digo con tarjetas, baterías y ninguna prisa.

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